Cómo hacer sustrato de hongos
Si crecieran hongos en el jardín, en lugar de papas, todos cultivarían champiñones. Sin embargo, los hongos no contienen clorofila, por lo que no pueden obtener su alimento del suelo común. Solo en suelos muy ligeros y ricos puede crecer y multiplicarse este manjar popular. Las mezclas preparadas se pueden comprar en la tienda, pero esto conlleva costos considerables. Es mucho más rentable, y nada difícil, cocinarlos en casa. Al saber cómo hacer un sustrato para los hongos, incluso los cultivadores de hongos novatos pueden proporcionarse un suelo de alta calidad para cultivar hongos.
¿Qué necesitas para preparar el sustrato?
Hay muchas “recetas” para el sustrato y cada aficionado tiene sus propios secretos. Pero siempre la base del compost son las materias primas vegetales (hojas, paja, pasto) y la materia orgánica (excrementos, estiércol), mezcladas con fertilizantes minerales. La diferencia puede estar en las proporciones y el uso de medicamentos específicos.
Por ejemplo, puede utilizar este método y preparar:
- 50 kg de paja;
- 50 kg de estiércol fresco;
- 4 kg de yeso;
- 1 kg de superfosfato;
- 2,5 kg de tiza;
- 2,5 kg de carbamida.
Cómo hacer un sustrato para champiñones: recomendaciones paso a paso
El primer paso es preparar la pajita: remojarla y dejarla durante tres días. Mientras la pajita se moja, puede hacer un aderezo mineral mezclando todos los fertilizantes en seco. Obtendrá un complejo mineral que fluye libremente; será más conveniente agregarlo que agregar los componentes por separado.
Cuando la pajita se moja, puedes empezar a preparar el sustrato:
- Coloque una capa de paja en el lugar preparado.
- Humedece con agua.
- Espolvorea con una mezcla de fertilizante.
- Colocar en la capa superior estiércol.
- Espolvorear con fertilizante nuevamente.
- Repite con 3 capas más.
Cada 5 días, la pila de abono deberá mezclarse con una horquilla, agregando agua para que se derrita y se descomponga de manera uniforme. En aproximadamente un mes, el sustrato de hongos estará listo.
Debe ponerse marrón pero permanecer húmedo y quebradizo. Si el abono huele a amoníaco y está pegajoso, aún no está listo.
Así, a partir del número especificado de componentes, se obtendrán aproximadamente 150 kg de sustrato para hongos. Y una vez que se haya cosechado la cosecha, el compost desempeñará otro papel útil en forma de fertilizante o mantillo para camas de jardín.