Antioxidante natural: como afecta el espino al cuerpo
Las bayas rojas, que recuerdan a las manzanas en miniatura, no solo son muy sabrosas, sino también saludables. Incluso los curanderos chinos sabían cómo afecta el espino al cuerpo humano. Hace mucho tiempo que comenzaron a utilizar la fruta con éxito para el tratamiento de muchas enfermedades, pero especialmente del corazón. Es el corazón al que más puede ayudar el espino, pero al mismo tiempo no pasa por alto otros órganos.
Cómo afecta el espino al cuerpo: propiedades útiles
Como resultado de tomar fondos a base de espino en nuestro cuerpo, ocurren cambios asombrosos:
- los procesos inflamatorios se detienen;
- vasodilatación, la presión arterial disminuye;
- el nivel de grasas en la sangre se normaliza (el indicador de colesterol "malo" disminuye, lo que sirve como prevención de la aterosclerosis y el accidente cerebrovascular);
- mejora la digestión, se elimina la indigestión;
- el cabello se fortalece y se previene la caída del cabello;
- la sensación de ansiedad y ansiedad disminuye;
- mejora la función cardíaca, aumenta la resistencia, desaparece la dificultad para respirar.
Además, las bayas de espino neutralizan la acción de los radicales libres que destruyen las células del organismo. El aire contaminado, las dietas poco saludables y los malos hábitos aumentan la cantidad de estos radicales. El espino, como antioxidante natural, ayuda a proteger contra tales efectos. Y para prevenir muchas enfermedades graves, como la oncología, diabetes, asma, enfermedad cardíaca.
¿A quién está contraindicado el espino?
Dadas las propiedades características del espino, en algunos casos, el uso de la fruta para el tratamiento puede tener un efecto secundario o generalmente está contraindicado. Por lo tanto, las bayas saludables y sabrosas no son adecuadas para mujeres embarazadas, mujeres lactantes y personas que tienen:
- hipotension
- aumento de la coagulación sanguínea;
- bradicardia;
- enfermedad cronica del higado.
Además, si toma espino durante mucho tiempo y en grandes cantidades, el pulso se ralentiza y se altera el ritmo de las contracciones del corazón. Por lo tanto, es necesario comenzar el tratamiento solo después de consultar a un médico.