Cómo congelar verduras para el invierno: hacer suministros útiles
¿Qué es una ensalada o borscht sin una fragante ramita de eneldo y perejil? Todos tratamos de mantener esas hierbas en la cocina y una de las formas de abastecerse de ellas es congelarlas. Hay varias formas de congelar verduras para el invierno, pero en general todas son sencillas. Lo más importante es que la casa tenga al menos un frigorífico con congelador, que mantendrá las especias hasta la próxima temporada. Después de recoger en el jardín o comprar plantas en el mercado que se utilizan en su cocina, puede comenzar a congelar de manera segura.
¿Se pueden congelar todas las hierbas?
Entonces, se "comportan" bien cuando se congelan y después:
- perejil;
- eneldo;
- apio;
- Alazán;
- Espinacas;
- ortiga.
Pero las cebollas verdes congeladas pierden su sabor picante y se vuelven aguadas. Se convierte en hierba insípida y hojas de lechuga descongeladas.
Cómo congelar verduras para el invierno.
Hay varias formas de congelar hierbas y cada ama de casa tiene su favorita. Aquí no hay recomendaciones claras, todo depende de lo que más te guste y de si tienes tiempo libre. Sin embargo, antes de comenzar a cosechar, no olvide lavar bien las hierbas y dejarlas secar. Absorbe bien el exceso de humedad con una toalla de papel o de algodón. Extienda las verduras lavadas sobre ellos, y luego no habrá trozos de hielo.
Entonces, puede preparar verduras en el congelador:
- Rebanado. Este es un método muy conveniente, pero lleva mucho tiempo, especialmente si los volúmenes son grandes. Corte las especias como las usaría normalmente y colóquelas en bolsas pequeñas.
- Soy lindo. Coloque las verduras picadas en una bandeja para cubitos de hielo y cúbralas con agua. Dichos cubos picantes se almacenan durante mucho tiempo y las verduras que contienen son las más frescas.
- Racimos. Es rápido y conveniente no solo de adquirir, sino también de usar. Clasifique el eneldo y otras especias en pequeños racimos. Envuélvalos en papel de aluminio o en una bolsa con forma de salchicha. Cuando lo necesite, simplemente ábralo, córtelo un poco y guarde el resto. Puede extender inmediatamente las ramitas en una bandeja y ponerlas en bolsas ya congeladas.
Guarde las hierbas congeladas con verduras. Pero no es recomendable ponerlo en carnes y pescados, para no saturar su olor.