El suelo correcto es la clave para el desarrollo saludable del anthurium: cuál elegir y cómo cocinarlo usted mismo.
El hermoso anthurium requiere más atención que otras flores de interior, y esto se refiere principalmente al suelo. De hecho, en la naturaleza, el anturio vive debajo de los árboles, donde hay mucha corteza y hojas viejas caídas, y sus densas raíces prácticamente no necesitan tierra. Al adherirse a trozos de corteza, la flor se fija firmemente y adquiere una posición más estable, y además recibe nutrición y humedad gracias a sus raíces aéreas.
¿Cuál debería ser el suelo para el anturio?
Tierra de jardín ordinaria para cultivar anturio demasiado denso y pesado. Será difícil para las raíces "respirar", como resultado de lo cual la planta no recibirá la cantidad necesaria de agua y aire, y con el tiempo la flor puede incluso morir por completo.
El suelo de anturio debe:
- sea ligero y suelto;
- es bueno pasar agua y humedad;
- secar rápidamente;
- no espesar después del secado;
- tienen una acidez débil.
Sustratos listos para comprar
A veces, se puede encontrar un sustrato de anthurium equilibrado en las floristerías. El contiene turba, corteza, arena, carbón y otros componentes y es la mejor opción para cultivar una flor. Los siguientes sustratos han demostrado su eficacia:
- Polessky;
- Forpro;
- Conjuntos de Aurica Gardens.
El anturio también crece bien en sustrato de orquídeas, siempre que se le agregue un suelo universal en una proporción de 1: 1.
Preparamos el sustrato nosotros mismos
Si no fue posible encontrar un suelo adecuado para el anturio, es muy posible prepararlo en casa. Esto requerirá una base y "ingredientes" adicionales que ayudarán a mejorar la calidad de la mezcla, dándole la soltura necesaria y enriqueciendo la composición.
Como base para un sustrato doméstico, puede tomar una mezcla igual de corteza y suelo de almacenamiento universal, que consiste en turba.
Los siguientes componentes son adecuados como aditivos:
- arena gruesa
- perlita;
- fibra de coco;
- un poco de sphagnum;
- carbón.
La proporción permitida de aditivos del volumen total de la mezcla principal es de hasta el 15%.