El poder de la naturaleza: germen de trigo, cómo germinar y cuánto usar para obtener beneficios
En el período otoño-invierno, nuestro cuerpo necesita urgentemente vitaminas. ¿Sabías que puedes obtenerlos no solo de frutas y verduras frescas, sino también de los brotes de cereales? Si se pregunta cuáles son los beneficios del germen de trigo, cómo germinar y cuánto usarlos, estudiemos este material juntos.
¿Por qué son útiles los brotes de trigo?
El trigo germinado tiene un sabor muy agradable, dulce, jugoso y tierno. Si lo incluye regularmente en su dieta, obtendrá un efecto sorprendente, a saber:
- mejora la visión, el metabolismo, el estado de la piel;
- aumenta la resistencia al estrés;
- la glándula tiroides funciona mejor;
- las uñas se vuelven más fuertes y el cabello, sedoso y más grueso;
- se restaura la microflora del estómago.
Brotes de trigo: cómo germinar y cuánto usar
Todo el proceso de "extracción" de nutrientes no le llevará más de 2 días. Lo más importante es encontrar el trigo adecuado para la germinación. Semejante cereal a menudo se puede encontrar en los supermercados, dada la moda moderna de una alimentación saludable. El envase suele decir "para germinar".
Asegúrese de clasificar y enjuagar los granos. Deseche todo lo que haya salido a la superficie, tal trigo no germinará, empape el resto. Coloca los granos en un plato y llénala de agua hasta que quede solo un par de centímetros por encima. Ahora déjelos toda la noche, cubiertos con un paño. Cambie el agua por la mañana, pero antes cubra el fondo del plato con un paño limpio y cubra con el trigo lavado. Cubrir con un segundo paño nuevamente y dejar en un lugar cálido hasta la mañana siguiente.
La temperatura ambiente debe rondar los 20 ° C. Verá los primeros brotes dentro de un día desde el momento del remojo. Todas las semillas germinan por completo en no más de dos días. Además, la cantidad máxima de vitaminas y minerales está contenida en brotes de no más de 2 cm de largo.
Los brotes de trigo pueden y deben consumirse crudos o agregados a ensaladas. Simplemente no los hornee ni fríe, porque entonces se perderán los nutrientes. Y asegúrese de masticar bien o moler en una licuadora. La norma diaria es de no más de 100 g, que deben consumirse por la mañana. Puedes comerlos a la hora del almuerzo o dividirlos en dos comidas. Sin embargo, no puede comer brotes por la noche, ya que son pesados para el estómago.